"Mamá, no puedo más, no aguanto una noche más, no me mato por ustedes, pero tengan cuidado con mi sensibilidad"
El 25 de julio de 2021, el cantante recibió una bala en el abdomen como defensa de parte de un policía, al que quiso acuchillar durante un brote psicótico.
“Mi hijo tiene 40 años y hace 20 años que sabemos que es adicto. Hace 20 años que damos esta batalla y que yo no tengo un sábado a la noche de paz, que no puedo dormir con el teléfono apagado porque no sé qué va a pasar con mi hijo al día siguiente. No sé si cuando amanece va a estar vivo” Marina Charpentier, madre de Chano
Es evidente que deberían generarse cambios, ya que la persona en cuestión no se encuentra dentro de sus facultades para poder decidir sobre lo que es mejor para sí mismo. No solamente debería tenerse en cuenta que el paciente necesita ayuda de forma inmediata, sino que bajo estos artículos (20 y 22 de la ley de salud mental) no se puede promover una recuperación a largo plazo.
Conocemos que el principal problema de las adicciones esta relacionado a lo social y lo saludable de la persona, es una enfermedad que debe ser abordada lo antes posible para evitar consecuencias irreversibles.
Sin embargo, son escasas las ocasiones en las que se habla sobre el significado para una familia en experimentar el deterioro de algún familiar que padece y no ve la luz al final del camino, por un lado porque no presenta el juicio conservado para poder decidir bajo sus circunstancias y no tener herramientas para poder decidir sobre su situación.
Por otro lado, no se encuentran claras las salidas a esta problemática, ya que las leyes siguen sin respaldar la situación del paciente, el artículo 22 respalda la capacidad de decisión de la persona sobre si desea o no estar internado involuntariamente, independientemente de si supone un riego o no hacia un tercero.
Por Nicolás Baritti - Estudiante de Psicología en la Pontificia Universidad Católica Argentina.
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